Seguidores

miércoles, 19 de junio de 2013

Verdad 22

Sinceramente, nunca me he considerado una persona presa de los móviles, las nuevas tecnologías y demás historias. No digo que no me gusten, ni digo que no pueda pasarme horas viciando: el caso es que hay que saber parar; y la mayoría de la gente no sabe parar. Vivimos en un mundo en el que desde pequeños se nos enseña que la comunicación tiene diferentes canales: Oral, escrito... Sin embargo, a lo largo del tiempo las cosas han ido cambiando. Los móviles, las tablets, los portátiles... han conseguido eliminar el trato humano en todas las vías posibles.
Mucha gente consigue expresarse de una manera envidiable por internet, mientras que luego en persona no tienen ni idea de que hablar, de como empezar una conversación.
A la mayoría de la gente le da vergüenza el simple hecho de pasar un rato a solas con alguien que no conoce. En cualquier generación anterior ambos habrían empezado una conversación cualquiera, un simple cambio de opiniones que puede no parecer nada, pero que realmente contribuye a que la capacidad comunicativa que tenemos se amplíe. En la generación actual, cada una de esas personas sacaría su móvil, sus cascos y se aislaría en su propio mundo, ajeno a todo lo que le rodea, y a todos.
Antes había de moda un chiste por twitter y otras redes sociales, que decia: "he quedado contigo, no con tu BlackBerry". Al pincipio a mi, como a todos, nos hacía gracia ese chiste: ingenioso, perspicaz... Solo me di cuenta del verdadero problema cuando pude comprobar que la amenaza se estaba volviendo real: los móviles han conseguido aislar a cada persona en su propio mundo virtual, en la que no hay espacia para más gente, a no ser que las tengas agregados y puedas hablar con ellas vía Internet.
Es horrible quedar con un grupo de amigos y que cada uno ande con el movil a su bola. Sin ir mas lejos, es terrible quedar con tu mejor amigo o tu mejor amiga y que esté mas pendiente de sus contactos de tuenti y de actualizar el twitter que de tener una conversación contigo. Solo demuestran,o parecen demostrar, que no eres lo suficientemente importante para ellos como para dejar sus contactos aparcados por una tarde.
Hoy en día la gente ya no sabe expresarse: se ha perdido la capacidad de hablar en público, y no solo la capacidad, sino las GANAS de hablar en público. Hoy en día es más fácil colgar algo que te ha pasado en twitter a contárselo en persona a tus amigos. Se acabaron esas conversaciones con la gente en el que poco a poco iras descubriendo más y más de ellos: Hoy, con una simple visita a su perfil, lo sabrás todo de la persona que quieras saberlo todo. Un simple vistazo y se eliminan cientos de conversaciones necesarias para conocerse mutuamente.
Incluso en los peores momentos, la gente busca apoyo en sus amigos vía internet. Les cuentan sus problemas por el chat y esperan a que la otra persona les escriba cualquier cosa intentando que se sientan mejor. ¿Quien va a sentirse mejor asi? En ese momento necesitas que te consuele un buen amigo o amiga, que te abrace, que te pase una mano por la espalda y te diga que todo va a ir bien; que se siente a tu lado, te escuche y te conteste, que se base en tu respiración para saber si lo que está haciendo es bueno o malo, que vea en los gestos de tu cara si realmente son sinceros esos "estoy bien" que decimos cuando no queremos hablar. Todo eso no puede conseguirse por una conversación por internet, y jamás se conseguirá.
Einstein dijo una vez: "Temo el día en el que la tecnología sobrepase nuestra humanidad". En su día nadie creyó posible que pudiera pasar algo semejante.
Hoy todos nos hallamos viviendo en uno de sus mayores miedos.